Estrés

El término estrés se aplica generalmente a las presiones que las personas tienen en su vida diaria. Se manifiesta como una descarga en nuestro cuerpo derivado de tensiones físicas o sociológicas. El proceso de cambios en la actitud que implica el estrés, implica reacciones emocionales como la ansiedad, la ira y la depresión.

Los síntomas de estrés más frecuentes son:
- Emociones: depresión o ansiedad irritabilidad, miedo, nerviosismo, confusión, fluctuaciones del estado de ánimo, etcétera.
- Pensamientos: excesivo temor al fracaso, excesiva autocrítica, olvidos, dificultad para concentrarse y tomar decisiones, pensamientos repetitivos...
- Conductas: risa nerviosa, trato brusco hacia los demás, incremento del consumo de tabaco, alcohol y otras drogas, aumento o disminución del apetito, llantos, rechinar los dientes o apretar las mandíbulas, etcétera.
- Cambios físicos: tensión muscular, manos frías o sudorosas, insomnio, dolores de cabeza, fatiga, problemas de espalda o cuello, indigestión respiración agitada, perturbaciones en el sueño, sarpullidos, disfunción sexual, etcétera.

Poblaciones a las que afecta: lo sufren normalmente personas con vida laboral, sobre todo aquellas que su trabajo es decisivo en la vida de las personas. El estrés es una enfermedad muy extendida en toda la población, pero sobre todo en la laboral el 59% de los trabajadores sufren algún tipo de estrés.

Recomendaciones para su tratamiento y el trato con el enfermo:
Se debe reconocer las cosas que no puede cambiar , evitar las situaciones estresantes, se recomienda hacer algo de ejercicio para despejar la mente, intentar tener una actitud positiva, intentar hacer algo que haga que disfrute, tener una dieta saludable, aprender formas de relajarse, pasar tiempo con sus seres queridos.
En el trato con el paciente se debe tener una actitud tranquila y tajante, siempre exponiendo de forma clara las pautas y haciéndole ver que es posible superar esta enfermedad y que con su colaboración todo será más sencillo.

Conclusiones: El estrés es una enfermedad de salud mental   delicada desde el punto de vista personal, ya que te hace sentir mal y a veces te conlleva a tener más enfermedades, es algo que debe tratarse, si por uno mismo no se puede superar se debe ir a un especialista.     

Mª Ángeles González - 2º BHS